Partimos de Boujadour sobre las once de la mañana. A estas alturas del viaje, en el convoy nos encontramos unos cuarenta saharauis, acompañados de tres observadores, en un total de nueve coches. Llegamos a Dajla sobre las seis de la tarde. En el control de entrada a la antigua Villa Cisneros, la policía nos registra los bultos del maletero, en busca de banderas o cualquier símbolo que tenga que ver con la RASD. Según vamos llegando a la casa de Mahyub Aulad Chej, comprobamos que la calle está tomada por los antidisturbios, portando porras, cascos y escudos.
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http://www.saharathawra.com/index.php...

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